En la ciudad de Huesca, el Gobierno de Aragón destina, hasta 2025, 217.719,57 euros que se sumarán a la inversión que realice el ayuntamiento. Con estos fondos se actuará tanto para el derribo de las chabolas que queden libres como para la rehabilitación de viviendas que sirvan para los traslados e integración de familias.

En el caso de Jaca el convenio recoge una subvención de 30.000 euros con los que se actúa para realojar a las familias chabolistas del barrio de San Jorge. El convenio con la ciudad de Jaca se gestiona a través de la Fundación Thomas de Sabba y el ayuntamiento.

También se han firmado convenios con los ayuntamientos de Épila y de Tauste. Para 2023 se han comprometido otros 30.000 euros para el realojo de una familia de Los Cabezos y el derribo de la infravivienda que quede libre, así como labores de sensibilización y educación e intervención con menores.

Respecto al convenio firmado con Tauste, se actúa con las familias asentadas en el “Barrio del Barranco”. En 2023 se han comprometido 30.000 euros para la adquisición de una nueva vivienda y las labores de educación, sociales y laborales necesarias.

El consejero de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda, José Luis Soro Domingo, ha firmado con los alcaldes de Jaca, Juan Manuel Ramón Ipas; Épila, Jesús Bazán Sanz; y Tauste, Miguel Ángel Francés Carbonel; y con la teniente de alcalde de Huesca, María Rodrigo Pla, los cuatro convenios de colaboración para la erradicación de los asentamientos insalubres. En el acto ha participado también la directora general de Vivienda y Rehabilitación, Verónica Villagrasa.

El Gobierno de Aragón destina un total de 150.000 euros este año para estos convenios. Con la aportación económica del departamento de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda se asumen los costes de la adquisición o arrendamiento de viviendas que permitan el traslado de las personas, la realización de reformas y mejora en las viviendas para mejorar la calidad de vida, el derribo de chabolas una vez se ha dado una solución habitacional o el acondicionamiento de las zonas en las que se ubican determinados asentamientos. En cada convenio se explican las acciones que se podrán desarrollar a lo largo del año y en función de las características de cada sitio. Las acciones se van llevando a cabo en coordinación con los servicios sociales y en el momento en el que se da una solución a la situación de cada familia.

Soro ha explicado que estos convenios tienen como objetivo erradicar la infravivienda y garantizar una vivienda digna, pero, además, el convenio debe servir para acompañar a aquellas personas que asuman una intervención integral para mejorar las condiciones de vida.

El consejero ha destacado la importancia de la colaboración entre los ayuntamientos y el Gobierno de Aragón. Ha destacado que más allá de la intervención en materia de vivienda, esta actuación implica poner a disposición de las familias toda una serie de recursos, estrategias y labor profesional para generar un trabajo de acompañamiento.

En el caso de Jaca, el convenio se gestiona a través de la Fundación Thomas de Sabba, que preside el alcalde de Jaca. Busca la intervención en el asentamiento del barrio de San Jorge en el que todavía se ubican una veintena familias. El convenio está dotado con 30.000 euros que estarán destinados a la rehabilitación de la cubierta de dos viviendas cedidas a la fundación, y que servirán para realojar a las familias, y la adquisición de inmuebles para la fundación.

El convenio de Huesca recoge una subvención de 60.000 euros que servirán para atajar el problema de infravivienda en el Camino de Jara. En estos momentos se ubican en este asentamiento siete viviendas, cuatro chabolas y una caravana. Tal y como ha señalado Soro “con la subvención se costeará el derribo y saneamiento de las chabolas que queden libres tras la intervención y la adecuación y saneamiento de las viviendas municipales a las que se trasladarán las familias chabolistas”.

En el caso de Tauste, la subvención de 30.000 euros se destinará a la adquisición o arrendamiento de viviendas que permitan el traslado de las familias ocupantes de infraviviendas y la realización de obras de reforma y mejora de las viviendas que sean susceptibles de actuación. En el caso de Tauste se actuará con familias que viven en chabolas o en cuevas en el Barrio del Barranco. Las viviendas no cumplen con los mínimos de salubridad y en algunas existen riesgo de desprendimientos e inundaciones.

Por último, el convenio con el ayuntamiento de Épila destina también 30.000 euros para actuar en la zona de Los Cabezos en la que se ubican 170 infraviviendas de las cuales un amplio porcentaje son cuevas. A través de la subvención del Gobierno de Aragón se asumirán los costes del derribo y saneamiento de las infraviviendas que queden libres tras la intervención de acompañamiento por parte del Ayuntamiento de Épila. También se destinará a la realización de obras de mejora, adecuación y conservación de aquellas casas cueva cuya situación lo permita. Además, con esta subvención se podrá actuar también en la reparación y mejora de infraestructuras municipales en la zona.

Convenios anteriores con Huesca y Jaca

El departamento de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda ya firmó dos convenios de similares características con los ayuntamientos de Huesca y Jaca en el año 2021. José Luis Soro ha destacado que “en algunas localidades existe ya una importante trayectoria y el trabajo realizado ha dado sus frutos. El año pasado ya firmamos convenios con el ayuntamiento de Huesca y la Fundación Thomas de Sabba de Jaca. Pero, incluso en estos casos, es necesario mantener esa colaboración para asentar los resultados conseguidos y perseguir objetivos más ambiciosos”.