30 Jul CHA-Monzón traslada al Senado su preocupación por el cierre del castillo desde finales de junio

Beatriz Gual, coordinadora de CHA-Monzón considera también necesario “intervenir en el camino de acceso a la ermita de La Alegría cortado por desprendimientos y en las laderas del castillo para evitar que caigan piedras en los corrales de las viviendas del Barrio de Santo Domingo, cuyos vecinos y vecinas se sienten impotentes ante un problema que sufren históricamente”

A finales del pasado mes de junio se produjo un derrumbe junto al aljibe del Castillo de Monzón, en un lateral de la rampa, entre el cuerpo de guardia y las caballerizas.

En principio se dijo que no parecía grave, pero su propietario, el Ministerio de Hacienda, ordenó su cierre sin que a día de hoy se haya intervenido y se conozca la fecha de apertura del castillo templario. Beatriz Gual, coordinadora de CHA-Monzón, señala que “el castillo es sin ningún género de dudas nuestro principal atractivo turístico y por ello no puede estar tanto tiempo cerrado por un derrumbe de pequeña magnitud, por lo que vamos a solicitar en el Senado que se intervenga ya, puesto que ya lleva cerrado más de un mes”.

Por otro lado, numerosos vecinos y vecinas de Monzón nos han hecho llegar su malestar y quejas porque el camino de acceso a la ermita de La Alegría permanece cortado por desprendimientos desde hace más de dos años, por lo que los usuarios se ven obligados a realizar un rodeo por caminos de difícil tránsito para acceder a sus fincas .

Al respecto desde CHA-Monzón creemos que es hora de intervenir, de una vez por todas en las laderas del castillo, para evitar los continuos desprendimientos de piedras que caen en los corrales de las viviendas del Barrio de Santo Domingo, cuyos vecinos y vecinas se sienten impotentes ante un problema que sufren históricamente.

“Consideramos que es necesario realizar una intervención global en la parte baja de la faldas del castillo y del entorno de los caminos como el de la Alegría, desde donde se producen los desprendimientos, para evitar que estos sean continuos poniendo en peligro a las personas que viven o transitan por la zona”, ha concluido Gual.