El departamento de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda, ha acometido las obras de urgencia para la rehabilitación en la iglesia de Valmadrid. Se ha actuado en la restauración del campanario, en el acceso de la fachada meridional y el testero oriental. En esta obra se han invertido un total de 206.933,12 euros de los cuales 196.309,32 (IVA incluido) se han destinado a las obras. De este último importe, el Gobierno de Aragón ha aportado el 92% y el Ayuntamiento de Valmadrid el 8% restante. Las obras comenzaron el pasado 3 de octubre y finalizaron el 3 de febrero. Esta semana se ha producido la entrega de las mismas.

Se ha acometido el retejado de la cubierta y se ha actuado en cornisas y alféizares. Tal y como ha explicado la directora general de Vivienda y Rehabilitación, Verónica Villagrasa, “también se ha retirado la estructura metálica exterior y se ha realizado un saneo de los muros, con cosidos de fisuras y sellado de grietas”. Además, se ha recuperado el volumen original del muro y el acabado original con yeso de Albarracín. Por último, se ha realizado el recubrimiento de los taludes para recuperar el nivel de apoyo del edificio y se ha generado una solera de hormigón y piedra.

Villagrasa ha explicado que “también se ha actuado en el interior de la iglesia con un saneo del muro y la bóveda que están situados entre la sacristía y el púlpito, una zona que se encontraba afectada por humedades”.

Se trata de una iglesia gótica del siglo XV que ya fue objeto de una intervención, en 2018 y por parte del Arzobispado de Zaragoza, para consolidar la cimentación.

Tal y como ha señalado la directora general “hemos actuado en la cubierta de manera urgente para solucionar los problemas derivados del deterioro por el paso del tiempo y por el colapso de una parte de la estructura”. De este modo se solucionarán también los problemas de humedades detectados en el interior de la iglesia debido al mal estado de la cubierta.

Verónica Villagrasa ha explicado que “se procedió a demoler y limpiar la zona de cubierta tras levantar la teja y el tablero de madera y se procedió también a la retirada de materiales orgánicos en las bóvedas”. Se ha realizado una limpieza de todos los elementos estructurales de madera de la cubierta, se han sustituido los rollizos de madera en mal estado por otros de madera de similares características, además se ha aplicado sobre los elementos estructurales un tratamiento preventivo contra xilófagos. Se ha realizado un proceso de impermeabilización y una cobertura de teja cerámica curva recuperada y procedente de derribo. Además, entre otras acciones, se han reparado las zonas deterioradas o desprendidas del alero con ladrillo visto.

La directora general de Vivienda y Rehabilitación, Verónica Villagrasa, ha visitado los trabajos realizados “centrados en la cubierta de la iglesia, la esquina suroeste, la fachada este, la torre y el reloj”.

Para actuar en la cubierta, entre otras actuaciones, se ha desmontado la cubierta existente para incorporar un nuevo entramado con viguetas autorresistentes de hormigón armado y sustituir dos vigas de madera que estaban afectadas por la humedad. También se ha reconstruido la cubierta con tablero cerámico y se ha colocado una gárgola de piedra. Para finalizar, se ha ejecutado una nueva cobertura de teja curva árabe recuperada.

Los trabajos en la esquina suroeste y fachada este de la iglesia ha servido para completar los trabajos ya realizados en la fase I. De esta manera se han ejecutado micro cosidos de fisuras en fábrica de piedra y se han sellado juntas y fisuras con mortero de cal.

En la torre se han restituido impostas rotas o desaparecidas de piedra caliza. Se ha realizado una limpieza en la cornisa de cubierta y en los ventanales y se han sellado juntas.

Actuación también en el reloj

En el reloj se ha realizado una nueva cobertura, para ello se ha desmontado la cobertura de teja existente y se ha ejecutado un nuevo empanelado con tablero hidrófugo, sobre la que se ha instalado un faldón de zinc, se han sellado juntas, se ha realizado un revestimiento de mortero de cal y se ha restaurado la numeración de la esfera del reloj.

La directora general de Vivienda y Rehabilitación, Verónica Villagrasa, ha explicado que en esta fase se ha completado la restauración de la torre, en las cubiertas laterales y cimborrio y en las fachadas que presentaban mayor deterioro. Uno de los principales problemas que se han tratado son los relacionados con las humedades en el interior.

En la torre se ha intervenido en la reparación de molduras y forjados y escaleras interiores. Además, se ha desplazado hacia el interior la campana de manera que se eviten las vibraciones que dañaban la estructura. De esta forma se recupera su posición original. También se ha instalado una escalera de acceso a la cubierta para facilitar el acceso y el mantenimiento.

En la nave, se han sustituido las cubiertas del altar, sacristía y cimborrio. En la fachada, se han atado las grietas y restaurado los revestimientos y eliminando los elementos impropios. Tal y como ha señalado la directora general “en la portada y la puerta de acceso se ha realizado un trabajo de restauración incluyendo la recuperación de las molduras desaparecidas”.

Humedades en el interior
Uno de los principales problemas detectados era la humedad de capilaridad que presentaba el interior y que producía desprendimientos. Para evitar esta patología, se ha instalado un sistema antihumedad y se han repuesto los revestimientos dañados. Además, se han realizado catas de pintura mural que han dejado al descubierto motivos vegetales en buen estado de conservación.

Actuaciones anteriores
En la primera fase de actuación, realizada en el 2019 por la Dirección General de Cultura y Patrimonio del Gobierno de Aragón, se trabajó para la consolidación y restauración de la torre campanario.

El consejero de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda, José Luis Soro, ha visitado las obras finalizadas en la iglesia de San Francisco en Teruel. Unas obras que se han llevado a cabo en cuatro fases, la fase 3 y 4 se han ejecutado a la vez, con una inversión total superior a los 800.000 euros y en la que “además de intervenir de manera efectiva para consolidar el edificio, hemos podido actuar para devolverle el esplendor original e instalar un sistema de calefacción por el suelo y un nuevo pavimento”. Soro ha recordado su compromiso con este edificio gótico en Teruel.

En las fases 3 y 4 se han invertido 343.848 euros (sin IVA) y se ha actuado en renovar la pavimentación interior de la iglesia, la instalación de un sistema de calefacción por suelo radiante con caldera de gas, la restauración de la parte de los muros interiores y la restauración de las vidrieras y tracerías de piedra que las contienen.

Con cargo al FITE 2016 se ejecutó la fase 1 que incluyó la rehabilitación de la cubierta y diversos elementos exteriores de sillería. Con cargo al FITE 2017 se llevó a cabo la segunda fase que supuso acometer los problemas de humedades en muros y restaurar la portada principal y lateral.