07 Mar CHA califica la visita del Presidente del Gobierno a Aragón como una “copia burda” del guión de la película “Bienvenido Mister Marshall”
CHA considera que la visita de Presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, supuso un menosprecio a las personas afectadas por las riadas de Ebro. “Llegar al Pabellón Puente de la Expo, acercarse a la ribera del Ebro y reconocer el hundimiento de la autopista ARA-1 es lo más cercano a una versión burda del guión de Bienvenido Mister Marshall que a una visita de un Presidente del Gobierno comprometido en conocer y querer resolver los graves problemas de la ciudadanía”, afirma el Secretario General de CHA, Juan Martín.
El Secretario General de CHA afirma: “Además es igual de indignante la respuesta del Presidente Rajoy cuando se le pregunta el porqué de su ausencia de los pueblos afectados, ya que su excusa ,”Yo voy adonde me llevan”, demuestra y mucho sobre cuál era y es el verdadero interés que tenía Mariano Rajoy por acercarse a conocer la realidad que está sufriendo las localidades afectadas por los efectos de la riada del Ebro”.
“Y todo ello rematado con un “”¿Esto hacia dónde va?”, refiriéndose al Ebro, es a “guinda” del desconcierto y desinterés que tiene y ha tenido este Gobierno a la hora de abordar el problema, tanto a la hora de tomar medidas para prevenir estas riadas, como en el momento de la gestión de las mismas (donde, recordemos, se han producido críticas entre las propias administraciones públicas implicadas), sin olvidar que, de cara al futuro, tampoco están adoptando las medidas políticas que realmente se necesitarían. De hecho, están intentando “cargarse directivas europeas” y se ha aprobado un “paquete de ayudas” que, según han denunciado ya las organizaciones agrarias, se muestran como claramente insuficientes para paliar la totalidad de las afecciones económicas producidas”, afirma el Secretario General de CHA.
Finalmente recuerda Juan Martín la desproporcionada presencia policial en el acto de protesta, convocado por CHA, donde se retuvo irregularmente a medio centenar de personas durante una hora, hasta que acabara el acto de Rajoy, “escoltando” hasta la salida del recinto Expo a todos y cada uno de los participantes, que en todo momento hicieron uso de su libertad de expresión de forma libre, pacífica y democrática.