CHA-Caspe traslada al Senado la inquietud por las afecciones que tendrá el cierre de la central térmica de Andorra también entre los regantes del Guadalope

“Las consecuencias para Caspe y Chiprana, para toda la cuenca del río Guadalope son claras y evidentes. La Central es quien paga desde hace 36 años el suministro de agua para los regadíos e incluso para agua de boca en determinados momentos de escasez hídrica desde que en 1981, la Central obtuvo concesión de bombeo de agua del río Guadalope para refrigerar sus instalaciones”, afirma Rafael Guardia Maza, portavoz de CHA en el Ayuntamiento de Caspe. 

Como contrapartida a la toma de agua del río Guadalope, del que se suministraba Caspe, la Central se comprometió con los regantes y personas afectadas de la cuenca a garantizar las reservas y aprovechamiento de agua desde el embalse de Mequinenza. También firmó asumir el coste del suministro de energía necesario para llevar a cabo esta captación. “Es fácil entender que si se hace efectivo el cierre de la Central de Andorra en 2020 como se ha anunciado, los gastos provocados por esta elevación tendrían que correr a cargo de los regantes y vecinos y eso es algo que no podríamos asumir por los altos coste que supone y como consecuencia de ello se produciría el abandono de tierras y, paulatinamente, la despoblación”, afirma el portavoz de CHA, quien muestra su solidaridad y apoyo con Andorra y su comarca afectados directos por el cierre de esta central térmica. 

De este modo las preguntas a presentar en la Cámara Alta por el senador Carles Mulet, fruto de los acuerdos políticos alcanzados entre Compromís y Chunta Aragonesista, son: 

“¿Qué medidas va a adoptar el Gobierno ante las afecciones que el anunciado cierre de la central térmica de Andorra generará también para los regantes y vecinos de la cuenca del río Guadalope, debido a que tendrían que ser estos usuarios quienes paguen el actual abastecimiento de agua de riego y de boca del embalse de Mequinenza, dado que es la Central quien paga desde hace 36 años el suministro de agua para los regadíos e incluso para agua de boca en determinados momentos de escasez hídrica, desde que en 1981, la citada instalación obtuvo la concesión de bombeo de agua del río Guadalope para refrigerar sus instalaciones?, ¿tiene previsto el Gobierno exigir a la propiedad de la central el cumplimiento de su compromiso con los regantes y personas afectadas de la cuenca para garantizar las reservas y aprovechamiento de estas aguas desde el embalse de Mequinenza?, ¿Va a compensar, en su caso, el gobierno a las personas afectadas para que se pueda garantizar un coste adecuado de este suministro de agua y evitar de este modo el consiguiente abandono de tierras, pérdida de puestos de trabajo e impacto indirectos en la economía que provocarían mayores índices de despoblación en la comarca?”.




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