31 May Sumar Aragón defiende una fiscalidad justa y progresiva que sustente un modelo de protección social basado en la garantía de derechos y servicios públicos

Álvaro Sanz: “No nos basta con resistir en tiempos de crisis. Exigimos que se consolide lo que en 2020 se asumió como temporal: Fortalecer la capacidad de la UE para garantizar la cohesión social y una gobernanza económica justa y que se elimine, de una vez y para siempre, la amenaza de las políticas de austeridad y los recortes antisociales”

“El 9 de junio se vota entre un modelo liberal, de recortes y austeridad, auspiciado por Vox, PP y la socialdemocracia, con quien comparten modelo económico, o un modelo de protección social basado en la garantía de derechos y servicios públicos financiados con una fiscalidad justa y progresiva, que defiende Sumar Aragón”, ha señalado Álvaro Sanz, candidato de la coalición, para quien “las elecciones europeas son decisivas para demostrar que el nuevo paradigma económico no fue una respuesta puntual a la crisis provocada por la pandemia en el año 2020”.

Sumar Aragón pone el foco en la importancia de las decisiones que se toman en la Unión Europea sobre la economía de los países miembros. En este sentido, recuerdan que las instituciones de la UE son las responsables de impulsar un modelo de políticas públicas en materia económica, entre otras. “Eso lo hemos vivido imponiendo la austeridad como receta a la crisis financiera tras el 2008, que priorizó el rescate bancario frente a los servicios públicos y que supuso importantes recortes, tanto en gasto público como en derechos básicos. Una receta que provocó muchos dramas sociales, precariedad, desigualdad y una recuperación de la economía y el empleo muy lenta”, ha lamentado Sanz hoy en Huesca.

Esperanza Jubera, candidata de Sumar Aragón, recuerda que, frente a la austeridad, tras la crisis de la Covid-19 y la guerra de Ucrania, los estados miembros de la UE, con la izquierda transformadora en el gobierno de España, han aplicado políticas contracíclicas y de protección social, “suspendiendo el corsé del Pacto de Estabilidad y Crecimiento e inyectando fondos públicos para la transformación de nuestro modelo productivo y para la recuperación de los servicios públicos, lo que ha provocado no solo la recuperación económica, sino que ha permitido alcanzar un récord histórico de personas activas cotizando”.

En este sentido, Sumar Aragón exige que se consolide lo que en 2020 se asumió como temporal: Fortalecer la capacidad de la UE para garantizar la cohesión social y una gobernanza económica justa y que se elimine, de una vez y para siempre, la amenaza de las políticas de austeridad y los recortes antisociales.

La coalición propone revertir los excesos de la era neoliberal en la que el diseño institucional europeo estaba consagrado a “blindar” los intereses del capital en detrimento de los derechos de la ciudadanía con el impulso de la Agencia Europea de Inversión, inspirada en la experiencia de los fondos NextGenerationEU, la defensa de un fondo europeo permanente para hacer frente a perturbaciones cíclicas, como el que contribuyó a financiar los ERTE en España y que salvó millones de puestos de trabajo y empresas.

Otra de las propuestas de Sumar Aragón es reformar la política monetaria. “Es un imperativo democratizar el Banco Centro Europeo con un papel más activo del europarlamento en su control y actualizar sus herramientas ya que, a día de hoy, están bastante limitadas para afrontar los riesgos económicos generados por la crisis climática y el contexto geopolítico”, ha apuntado su candidato, Miguel Martínez Tomey. “El BCE el siglo XXI debe asumir como objetivos la sostenibilidad de la actividad económica y el equilibrio entre la lucha contra la inflación y el pleno empleo”, ha reiterado.

Asimismo, Martínez Tomey considera fundamental una “profundización democrática de la economía”, eliminando la evasión de impuestos de los más ricos y en la economía digital, los paraísos fiscales, territorios de baja tributación dentro de la UE y el fraude fiscal. Para ello, Sumar Aragón defiende la adopción de un impuesto mínimo del 2% sobre las fortunas de milmillonarios, un impuesto europeo para operaciones de la economía digital, la armonización del impuesto de sociedades para las grandes corporaciones multinacionales y el impulso de un plan de choque integral para luchar contra el fraude fiscal en la Unión Europea.